La paz, el diálogo y la sana convivencia en los entornos escolares.
Durante el mes de septiembre, la Escuela Normal Superior Nuestra Señora de Fátima se unió a las demás instituciones educativas del municipio de Sabanagrande para celebrar el Mes de la Paz y la Convivencia, en el marco de la Red Educativa Compaz Sabanagrande, integrada por la Institución Educativa San Francisco Cartusciello, San Juan Bosco, la Escuela Normal Superior Nuestra Señora de Fátima y la Institución Privada Niño Jesús.
Esta red nace con el propósito de fortalecer la paz, el diálogo y la sana convivencia en los entornos escolares, promoviendo espacios que fomenten la empatía, la reconciliación y el respeto por la diversidad.
La programación del mes inició con una apertura en la plaza principal del municipio, donde estudiantes, docentes y directivos participaron en una marcha simbólica por las calles de Sabanagrande, llevando el mensaje del lema: “Generando vida en la interculturalidad y la socioemocionalidad”.
A lo largo del mes, se desarrollaron diversas actividades académicas, culturales y comunitarias, entre ellas el Cuarto Conversatorio “Mi escuela: territorio de paz y convivencia”, el Sexto Simposio “Convivencia y Paz desde la escuela en ambientes de aprendizaje emergentes” y la tradicional Marcha de la Solidaridad, en la que participaron la Alcaldía Municipal, el Hospital Local, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y las distintas instituciones educativas.
Durante esta marcha, los participantes ofrecieron productos no perecederos destinados a las familias más vulnerables de la comunidad, como un gesto de amor y compromiso con quienes más lo necesitan.
El cierre del mes se llevó a cabo en la Institución San Francisco Cartusciello, con una Eucaristía de acción de gracias y un encuentro juvenil que reunió a representantes de todos los colegios del municipio. Este espacio permitió reflexionar sobre la importancia de trabajar por la memoria, la reconciliación y la paz, especialmente en un país marcado por el conflicto armado, la migración y las diversas formas de violencia estructural.
Durante la jornada final, los personeros estudiantiles de las instituciones participantes presentaron un Manifiesto por la Paz, comprometiéndose a promover la convivencia, el respeto y la solidaridad desde sus propios entornos escolares.
El Mes de la Paz y la Convivencia dejó una huella profunda en la comunidad educativa de Sabanagrande, motivando a los jóvenes a seguir construyendo un país más justo y esperanzador. Como comunidad, reafirmamos nuestro deseo de educar para la paz, fortalecer la vida socioemocional y abrazar la interculturalidad como camino de crecimiento común.
-Sor Lísber Arnoris Zuluaga Santa


